El desafío de conjugar el acceso abierto con la innovación tecnológica

¿Cuál es el límite entre la liberación de los datos de investigación y la protección de los resultados que podrían transformarse en innovaciones científicas? Este y otros temas fueron abordados por el proyecto InES Ciencia Abierta en la Facultad de Ciencia Usach.

Las nuevas políticas de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) en torno al acceso abierto al conocimiento aún generan interrogantes en la comunidad. Con la finalidad de resolverlas, el Vicedecanato de Investigación y Postgrado de la Facultad de Ciencia de la Universidad de Santiago de Chile invitó a InES Ciencia Abierta a dictar una charla el 9 de mayo de 2024 en el Departamento de Matemática y Ciencia de la Computación (DMCC).

“En la Facultad de Ciencia estamos preocupados mayoritariamente por la generación de conocimiento básico y, en los últimos años, en la aplicación de este. Es ahí donde surge el desafío con esta nueva política: ¿cómo tener acceso abierto a los datos y a las publicaciones resguardando el conocimiento que podría eventualmente generar innovación tecnológica?”, señaló el Vicedecano de Investigación y Postgrado de la Facultad de Ciencia de la Usach, Dr. Roberto Bernal Valenzuela, actual Coordinador de la Facultad de Ciencia en el Eje de Vinculación con el Entorno Socioeconómico del Consorcio Science Up.

La charla “Prácticas de investigación para la apertura de las publicaciones y datos de investigación”, fue dictada por Tania Aldunate Gangas y Daniela Tamayo Yáñez, bibliotecarias del proyecto InES Ciencia Abierta. En esta plantearon diversos aspectos de la Política de Acceso Abierto a la información científica y datos de investigación financiados con fondos públicos de la ANID, publicada en 2022, y los mecanismos de implementación en la Usach.

Esta normativa indica que los instrumentos/concursos financiados por ANID deben publicar en acceso abierto las publicaciones y los datos de investigación, los cuales deberán depositarse en un repositorio  institucional, ya sea de la ANID u otro, una exigencia que, en el caso de los datos de investigación, debe cumplirse a más tardar un año después de rendir el informe.

El proyecto también insta a que, a partir de licencias, se dé autorización al uso de estos datos, lo que planteó dudas sobre su efecto ante posibles patentes. A esto las profesionales respondieron que ese tipo de datos están dentro de los que se excluyen de lo solicitado por ANID, junto con los relativos Ley de Protección de la Vida Privada, los sometidos a acuerdos de confidencialidad y otros datos que la agencia ponderará si corresponde o no difundirlos. 

“Sí se desea gestionar algún derecho de propiedad industrial o se tiene algún acuerdo con un tercero que no permita la apertura de los datos de investigación, se deberá informar a la ANID para que evalúe la solicitud. De igual forma, la política menciona que se deben publicar los metadatos y que una vez cesada esta excepción, se deberán publicar en acceso abierto”, señaló Tania Aldunate Gangas.  

Frente a la exigencia de los cuadernos de laboratorio, donde se alberga el know-how que podría señalar cómo se llegó al resultado que dio origen a la innovación, Daniela Tamayo Yáñez señaló que, “al ser una práctica, no se demanda que los cuadernos de laboratorio se compartan en un repositorio de datos. Sin embargo, su inclusión puede proporcionar un contexto valioso y detalles específicos que enriquezcan los datos que se disponibilicen”, destacó.

Más información en la Guía Introductoria de Ciencia Abierta, de VRIIC Usach:  https://www.usach.cl/news/usach-publica-guia-aborda-mecanismos-para-realizar-investigaciones-mas-accesibles#:~:text=Descarga%20la%20gu%C3%ADa%20aqu%C3%AD