Facultad de Ciencia: El desafío de la investigación en tiempos de pandemia
El resultado del proceso de acreditación de la Universidad de Santiago de Chile, que certifica su excelencia y calidad, ha impactado positivamente en las unidades de la Universidad. Para la Facultad de Ciencia, cuya misión ha sido impartir docencia, realizar investigación y desarrollar perfeccionamiento y didáctica de las ciencias físicas y matemáticas, este logro potencia su trabajo en la formación de profesionales capacitados en ciencia para contribuir con aportes significativos al país.
Juan Escrig Murúa, Doctor en Ciencias con Mención en Física (Usach) y Decano de esta facultad creada hace 45 años, explica que “la Universidad de Santiago de Chile se posiciona como una de las cuatro instituciones que tienen la máxima calificación de 7 años, entregando un sello de calidad a la formación que reciben nuestros estudiantes.Eso impacta directamente en los nuevos estudiantes, quienes pueden acceder a financiamiento estatal o recursos que cuentan con garantía fiscal para el financiamiento de sus estudios”.
Así mismo, esta facultad ha sido importante en la acreditación. Sobre todo por su trabajo en investigación y en docencia en sus seis pregrados (Ingeniería Estadística, Ingeniería Física, Ingeniería Matemática, Licenciatura en Ciencia de la Computación, Pedagogía en Matemática y Computación, y Pedagogía en Física y Matemática), dos programas de doctorado y tres programas de magíster.
“Las académicas y los académicos de la Facultad de Ciencia estamos acostumbrados a ser evaluados. Un ejemplo claro de esto es que todas nuestras carreras de pregrado y programas de postgrado se encuentran acreditados o en proceso de acreditación, y trabajamos diariamente para mejorar nuestros procesos internos, la formación que entregamos y la calidad de nuestra investigación, la que siempre es revisada por pares internacionales”, indica.
El principal problema que enfrenta esta unidad es la pandemia, la que ha afectado a todas las áreas en las que se desempeña la Facultad de Ciencia. El principal problema tiene relación con la investigación experimental, ya que los laboratorios de investigación han estado detenidos por casi un año. A pesar de ello, la investigación teórica sigue produciendo, con las complejidades propias de trabajar desde casa.
“El problema está en que no solo los científicos y científicas se ven afectados por esta situación, sino que también los estudiantes de postgrado, y algunos de pregrado, cuyas becas tienen una duración finita, por lo que destaco la enorme resiliencia de cada uno de sus integrantes por sacar adelante un año académico complejo. Este año esperamos comenzar a retomar, poco a poco, las actividades experimentales, y esperamos que quienes financian becas y fondos de investigación establezcan la necesaria flexibilización”, dice.
Según explica Escrig, la Facultad pondrá en marcha varios cambios a nivel de Decanato: “Vamos a generar una estructura que releve el área de Vinculación con el Medio y una sub-unidad de Educación Continua, para que nuestros egresados puedan actualizar sus conocimientos o perfeccionarse en nuevas técnicas y/o disciplinas. También estamos trabajando en una nueva unidad de virtualización y en potenciar la ciencia aplicada con una estructura que se haga cargo del proyecto Ciencia 2030 al interior de la Facultad”.
Cabe destacar que el trabajo de la Facultad de Ciencia en las áreas de Educación Continua y Vinculación con el Medio, ha sido apoyado por Empresas y Fundaciones Usach, siendo parte del levantamiento de diferentes diplomados, cursos, asesorías en didáctica de las matemáticas y perfeccionamiento para profesores de enseñanza media, así como también en el desarrollo de los laboratorios propios.
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